... en Tus Entuertos Me Entumecen.
Lo que comenzó, en la Primera Temporada, como una comedia de situación deviene en un policial gracias a dos pseudo-muertes repentinas y poco claras que rozan apenas el humor negro. En este contexto en el que nada es lo que parece, el autor analizará las distintas teorías en las que se ve involucrado, teorías sobre los asesinatos estructuradas a partir de flashbacks marcados por cambios de tipografía, que nos hacen volver una y otra vez a la escena del crimen. La idea es que cada flashback esté trabajado, incluso desde las actuaciones, desde el punto de vista del personaje que relata (el autor del blog, claro).
Y de esta forma, asistiremos a distintas subtramas que favorecen la intriga: dos despedidas de soltero, una novia neurótica que intentará boicotear la despedida de su novio, la muerte de distintas ilusiones, una rubia histérica que por culpa de un maldito trueno se convertirá en un fuckin' karma, la escritura y re-escritura de una obra de teatro para un productor mejicano, una mudanza, una espalda fracturada, la aparición de Ojis Verdis, y... por supuesto, las dos muertes anunciadas.
A buen entendedor, pocos palabras. Es hora de que comiencen a juntar las piezas para armar el rompecabezas.
Peón 4 Rey.
Muy Pronto.
jueves, marzo 17, 2005
This fall...
martes, marzo 08, 2005
Personajes para no proyectar
Los seres humanos nos (auto)construimos continuamente mediante lo que decimos y lo que hacemos según las situaciones en que nos encontramos. De esta manera, hay una multiplicidad de posibles (auto)construcciones, de acuerdo con los contextos cambiantes que habitamos. Entonces, hablamos de "persona", de personas reales, de carne y hueso como nosotros, y de "personaje", cuando hablamos entes de ficción que no son sino palabras sobre papel convertidas en imágenes mentales. En este caso, mis amigos, sus imágenes mentales.
Concluyo esta primera parte dejandoles una frase de otra cosecha: la persona pertenece a la realidad, mientras que el personaje sólo existe dentro de la ficción.
Que groso soy.
Esto, a fin de cuentas, es lo que significa conocer a una persona, o a un personaje: construir una imagen mental de él a base de los datos de que disponemos, que son lo que podemos observar desde fuera y cotejar mentalmente con nuestros conocimientos preexistentes, nuestra experiencia, y con nuestros propios deseos.
Continuo entonces, la distinción entre persona y personaje es ilusoria.
Este blog pretende potenciar mucho más la segunda faceta, ya que muy pocos quisieran conocer a la "persona"; bienaventurados los que abrazan la noción del "personaje".
viernes, marzo 04, 2005
No more quotes
La literatura le sirve al personaje como medio de seducción y al mismo tiempo como eco de sus emociones. Citar significa "extraer de las fuentes una opinión de un autor para apoyar la propia o probar lo que se dice o refiere". Así, las citas son informaciones que se utilizan como prueba o como punto de apoyo para el desarrollo o demostración de una idea.
Mmm... Para mí, las citas ya fueron. Volverán según lo amerite lo escrito.
No vamos a desestimar el gran valor que tuvieron, por supuesto. En primer lugar, han sido funcionales para la creación de un ambiente. Bien por esto, sí. También, ponían en relieve el estado emocional del narrador. Buen punto, pero ya no me sirve. No olvidemos que muchas veces una cita era tan sugestiva que opacaba la narratividad. Entonces, no.
No tenía mucho sentido, se perdía la hilación de los hechos; y uno comenzaba a juntar palabras para que cierre la cita. No va más.