Atentos. Gato. Felino, cuatro patas, ojos de gato. Esa clase de gato. Negro, obvio. ¿Para que querés ser un gato? ¡Es que yo no quiero ser un gato cualquier, oh poderosa y omnipresente Conciencia que todo me lo cuestionas! Yo quiero ser una pantera negra que tomo una pastilla de chiquitolina, pero que todo el mundo se piense que soy un gato. Ahí ya nos vamos entendiendo. ¿Para qué? ¿Con qué fin? Todavía no lo tengo muy claro... Pero tuve un sueño. Soñé que un día mis cuatro hijos negros no eran juzgados por el color negro de su piel, sino por el contenido de su responsabilidad.
Hoy he tenido un sueño. He soñado que un día los valles serán rellenados, las montanas serán aplanadas, los caminos tortuosos serán enderezados y la gloria del... Un mundo... Bueno, para eso quiero ser gato, y tener el pelaje sedoso, suavecito y... bueno, eso.
domingo, febrero 08, 2004
Gato negro
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario