The italian job: Más ladrones simpáticos

La cosa viene así. Un grupo de ladrones simpáticos lleva a cabo a la perfección el robo de una caja fuerte llena de lingotes de oro. Mientras esperan repartir el botín, uno de estos ladrones (que a partir de este momento deja de ser un ladrón simpático) traiciona al resto, y se lleva todo el oro. Chin pum. Y ahora sí, empieza la película. El punto fuerte The italian job es inevitable. El elenco. Yo compro películas así, aunque solamente los conozca yo solo. Y en este caso, los secundarios de lujo son Seth Green y Jason Statham. De hecho, me importo muy poco que labure Edward Norton. Yo quería ver a los dos antes mencionados. Bueh, la película, cierto. Y cumplió, entrenerme bastante. Generalmente, cuando veo esta clase de películas intento cagarme el final buscando la previsibilidad del guión. Sin embargo, no dejo de llamarme la atención el hecho que, sinceramente, fue plenamente disfrutable y cuando me dí cuenta ya había terminado todo, con final sorpresivo y todo. Igual, si me hubiera puesto en cabrón, em lo hubiera cagado de todos modos, pero eso solo em pasa cuando la película me hace pensar más en sus defectos que en sus aciertos.

Las escenas de acción pasan de ser simples escenas de acción, se transforman en una mini-aventura, eso las hace llevaderas y divertidas. No solamente persecuciones, explociones o dialogos filosos que terminan con todos los actores aputandose a la cabeza. Cada escena tiene un "¿por qué?", y ese detalle es lo que la convierte en una pequeña aventura.

Los actores estan bien. Green y Statham no me defraudaron y cada uno en su rol, cumple con su onda de ladrón simpático. A Norton no le cabía otra que el ladrón simpático cagador, más que nada para explotar su lado histrionico y su fama (bien ganada) de buen actor. Donald Sutherland aparece en esas actuaciones que sólo le caben a los que ya estan de vuelta y la tienen la clara. La pareja protagónica/romántica (?) son Charlize Theron y Mark Whalberg, pero sinceramente no les preste mucha atención.

Y así estamos, buena película, divertida.

Es una película elegante.